Estamos en pleno verano y las ganas de bebidas frías y refrescantes no se han esfumado todavía. Una de nuestras bebidas preferidas y a la que muchos no quieren renunciar pese al calor es, sin duda, el café. En Berlín hay multitud de amantes del café y, si se sabe dónde buscar, no es complicado encontrar un delicioso y refrescante café frío.
Tanto si vives en la ciudad como si estás de visita y echas de menos un buen café con hielo, te interesa este artículo. Hemos elaborado una pequeña selección de lugares donde disfrutar de un café frío en sus diferentes versiones.
Un clásico: café con hielo en el Populus Coffee
El café frío más popular del verano, el clásico café con hielo. Algo tan sencillo como preparar un espresso y verterlo en un vaso con cubitos de hielo. La decepción llega cuando te das cuenta de que en Berlín el café muchas veces es de filtro, y en otros tantos lugares ni siquiera hay hielo y te lo dan frío sin más o con un minúsculo cubito de hielo que se derrite antes de llegar a la mesa. Para ir sobre seguro, nuestra recomendación es pedirlo en el Populus Coffee. Vasito de cristal, café de calidad y generosa cantidad de cubitos de hielo.
Un affogato en el Sironi
Una tradición que es popular en Italia durante el largo y caluroso verano es el affogato al caffè, en Berlín se puede pedir también símplemente como affogato. Aunque técnicamente no es café frío en el sentido clásico, sino que se cuenta más bien entre las especialidades de helados. ¿En qué consiste? Se colocan una o dos bolas de helado (normalmente de vainilla) en una taza y luego se agrega encima un espresso, “ahogando” así al helado. Literalmente significa eso, café ahogado. En la pizzería Sironi lo sirven muy rico, y la mejor opción es con su helado casero de avellana.
El supercremoso Iced Latte del Camon Coffee
Combinado que es ya todo un clásico en Berlín: el Iced Latte. Es un café frío de los más solicitados, similar a un Kaiku Café Latte, y en el Camon Coffee lo preparan además con mucho cariño. Para hacerlo solo hay que verter uno o dos espressos sobre un vaso grande lleno de espumosa leche (leches veganas también cuentan y aquí tienen de avena y soja), batir y luego agregar cubitos de hielo. En el Camon Coffee también sirven una versión un poco más exótica a base de leche de coco, el delicioso y refrescante Coconut Iced Latte.
Café frío vietnamita en el Quà Phê
El café vietnamita, o cà phê sữa đá (literalmente café con leche y hielo), es una auténtica golosina que cualquier persona aficionada al café frío debería probar. Recomendamos el del pequeño bistró Quà Phê donde tuestan sus propios granos con aroma a chocolate y nueces. Luego se va filtrando con unas pequeñas jarritas directamente sobre un vaso con leche condensada. Para convertir esta deliciosa mezcla en café frío solo hay que verterla en un vaso con hielo y ya estaría. Aquí además lo puedes acompañar con alguno de sus dulces coreanos tradicionales.
El mejor espresso Martini en el Alaska Bar
El espresso Martini, aunque un cóctel, entraría también dentro de la categoría de café frío, y en el Alaska Bar lo preparan riquísimo. Bueno, allí todo está riquísimo. El atento y experto personal de barra de este ya imprescindible bar de Neukölln lo prepara con vodka, licor de café y espresso. Todo mezclado en una coctelera llena de cubitos de hielo y agitado vigorosamente. Feliz Feierabend!
Espresso Tonic de La Maison y un paseo por el canal
Otro tipo de café frío probablemente desconocido para la mayoría, pero delicioso, refrescante y perfecto para los días de calor es el espresso tonic y que no es más que un buen espresso suspendido sobre una cama de agua tónica transparente y burbujeante rematada con hielos. Una combinación que sirven para llevar en el café francés La Maison (conocido además por su variedad de panes y dulces franceses) a orillas del Landwehrcanal.
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¡Qué interesante! Me gustaría probar el afogato de avellana y el café con tónica. Tiene que quitar la resaca, jajaja.
¡Qué interesante! No tenía ni idea de la existencia de estos cafés tan extravagantes. Me encantaría probar el afogato de avellana y el café con tónica. Tiene pinta de quitar la resaca.