Spreepark, el parque de atracciones abandonado en Plänterwald, mito de la RDA y uno de los símbolos de la cultura underground de Berlín, reabrirá sus puertas en 2019.
Antes de su declive y total desplome, Spreepark fue un lugar de afluencia masiva. Inaugurado en 1969 (obsequio a los habitantes de la RDA con motivo del 20.º aniversario de la fundación de la república comunista), fue el único parque de atracciones de la RDA y llegó a registrar 1,5 millones de visitas al año.
Después de la reunificación alemana, el parque se mantuvo vivo gracias al Senado y a la empresa Spreepark Gmbh que junto al exdirector del parque, Norbert Witte, establecieron como objetivo modernizarlo para atraer más visitantes.
Sin embargo, la acumulación de deudas, conexiones pésimas de transporte para llegar al parque, la reducción de la superficie y la falta de aparcamiento en la zona mermaron las visitas y propiciaron su cierre en 2001 cuando Witte, con miedo a la bancarrota, tomó algunas de sus mejores atracciones y huyó de Alemania para iniciar un nuevo parque de atracciones en Perú (también fallido). Como resultado, dejó atrás al moribundo Spreepark y 15 millones de euros de deuda.
Desde 2009 y con el propósito de evitar las visitas furtivas y rentabilizar lo imposible (aun abandonado, el parque genera al año un millón de euros de gastos entre seguridad y mantenimiento), se abrió al público con una serie de visitas guiadas aprovechando la fascinación que se había generado a su alrededor, pero que, al fin y al cabo, restando la emoción que suponía encontrar la manera de colarse y explorarlo libremente, no es más que un conjunto de barcas varadas en la hierba, dinosaurios de cartón piedra tatuados con grafitis, una noria de 40 metros de altura (la gran atracción) completamente carcomida por el óxido, carruseles y góndolas roídas en forma de cisne.
Entre 2002 y 2015, muchas han sido las empresas que han intentado adquirir el parque con diferentes proyectos en mente, hasta que finalmente, la ciudad de Berlín decidió comprarlo de nuevo. Desde 2016, Grün Berlin GmbH está a cargo del parque y está ideando mejoras y realizando obras de remodelación para su reapertura, programada durante 2019 coincidiendo con su 50.º aniversario. Su objetivo es convertir Spreepark en un parque público, de atracciones y un lugar donde combinar temas de arte, cultura y naturaleza. Para ello han contado, además, con la participación de vecinos y ciudadanos a través de talleres y encuestas, cuyos resultados se tendrán en cuenta a la hora de planificar el futuro del parque.
Con la intención de resucitar la esencia de lo que un día fue y mantener vivo su encanto, la mayor parte de las atracciones antiguas permanecerán como decoración, a excepción de la noria, —símbolo del parque y parte del paisaje de Berlín—, única atracción que va a ser devuelta a una segunda vida. Respetando la vegetación circundante, nuevas atracciones, restaurantes y un gran Biergarten completarán el proyecto del nuevo Spreepark, haciendo las delicias de grandes y pequeños con una nueva oferta de ocio para uso y disfrute de todos los habitantes y turistas de la ciudad.
¡Hasta pronto Spreepark!
Las visitas guiadas se reanudan a partir del 30 de marzo: sábados, domingos y festivos (con turnos a las 11, 13 y 15 horas).
Además a partir del 31 de marzo, el Info-Pavillon abrirá sus puertas todos los domingos de 12 a 16 horas, donde se presentará visualmente el futuro Spreepark.
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