Marzahn ha sido siempre un barrio difícil. Fue un pueblo que pasó a formar parte del llamado «Gran Berlín» en 1920, como localidad del distrito de Lichtenberg. Un barrio a las afueras de la zona urbana en el cual se encontraba un campo de trabajo donde se internó a gitanos durante los Juegos Olímpicos de Verano de 1936, lejos de los ojos de los visitantes. Marzahn siguió siendo rural hasta que se construyeron las grandes urbanizaciones (todavía en pie hoy en día) en 1977, durante el periodo de la RDA.
No es una arquitectura hecha para gustar, es una arquitectura funcional y precaria. Pero si sabes mirar bien, podrás ver que tiene algo especial. La armonía de sus formas y los colores que posteriormente se han añadido levantan una singular jungla de cemento al más puro estilo soviético que es digna de visitar y fotografiar, creando esas formas abstractas a través del visor.
El estilo arquitectónico de estos edificios, que se prolongó hasta finales de la década de 1980, es conocido como Plattenbau y hace referencia a un edificio (Bau) construido con grandes losas de hormigón (Platte), típico en áreas de desarrollo de viviendas públicas. Estas áreas son las llamadas Neubaugebiet (Nueva área de desarrollo), siendo Marzahn la mayor Neubaugebiet de Alemania Oriental.
Prácticamente todos los edificios residenciales nuevos desde la década de 1960 se construyeron con este estilo, ya que era una forma rápida y económica de frenar la grave escasez de viviendas del país, que había sido causada por los bombardeos durante la guerra y la gran afluencia de refugiados alemanes desde más al este.
Hoy en día sigue siendo un barrio de trabajadores aparentemente normal pero, si miras detenidamente, descubrirás una nave espacial que da forma a un centro comercial, colmenas de edificios apilados y una escultura gigante que sirve de mirador para contemplar esta curiosa jungla en panorámico.
Texto y fotos: Palma Llopis para BA, abril 2022
