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Una noche en la ópera #9: “La bella durmiente” (ballet de Piotr Illich Chaikovski)

La bella durmiente - Staatsballet Berlin en Deutsche Oper Berlin

(Con la colaboración especial de Deutsche Oper Berlin y el Staatsballet Berlin)

Este cuento de hadas-ballet estructurado en un prólogo y tres actos se estrenó en 1890 en el Teatro Mariinski de San Petersburgo. Con música compuesta por Piotr Illich Chaikovski, es el segundo de sus ballets más aclamados después de El lago de los cisnes. La coreografía original corrió a cargo de Marius Petipa (maestro del ballet imperial de Rusia) y de la escenografía se encargó Ivan Vsevolozhsky; ambos escribieron el libreto, basado en el cuento La bella durmiente del bosque, publicado por Charles Perrault en 1697 (con título original Dornröschen), y la versión de la misma historia de los hermanos Grimm de 1812.

Después del éxito fallido del estreno de El lago de los cisnes, Chaikovski se mantuvo algunos años alejado de la composición para ballet. Sin embargo, esta obra ambientada en el Barroco europeo de la época de Luis XIV permitió a Chaikovski componer música en esa dirección. La pieza fue recibida con mucho más calor por la prensa que había publicado algunos años antes críticas tibias o desfavorables sobre el primer ballet de Chaikovski. Sin embargo, se convirtió en un éxito rotundo e instantáneo fuera de los teatros rusos. La bella durmiente ocupa un lugar permanente en el repertorio clásico y es hoy en día el segundo ballet más popular del compositor ruso tras El lago de los cisnes. Desde su estreno hace más de un siglo se han llevado a cabo diversas representaciones notables en todo el mundo.

«Me parece que la música de este ballet se convertirá en una de mis mejores creaciones. El motivo es muy poético, musicalmente tan provechoso que cuando lo componía estaba tan entusiasmado que lo escribí con pasión y calor, que son precisamente los requisitos de una buena obra», escribió Chaikovski. Se trató de la primera colaboración entre Marius Petipa y el compositor, lo cual asentó los principios de la síntesis entre sinfonía y ballet, y que se podría definir como un poema coreográficamente sinfónico, en el que el ballet y la sinfonía se funden.

Chaikovski y su segundo ballet más popular

Los tiempos cambian; La bella durmiente permanece. Todos los bailarines de ballet rusos consideraban el dominio de la interpretación de los roles en esta pieza como una obligación evidente. El éxito fuera de Rusia llegó en 1921 de la mano de Serge Diaghilev con sus Ballets Rusos en Londres que escenificaron una breve versión de la obra llamada La boda de Aurora.

Durante la preparación del ballet, Petipa pasó a Chaikovski una lista detallada de instrucciones con las directrices musicales muy específicas sobre el tempo, la métrica, la longitud de determinadas piezas y el número exacto de algunos compases que estimularon la creatividad del compositor en lugar de desatar un conflicto irresoluble entre compositor y coreógrafo. El ballet se centra en las dos principales fuerzas en conflicto: la del bien, representada por el hada de las lilas (Julia Golitsina), y la del mal, encarnada por la bruja Carabosse (Michael Banzahf).

Entre esas dos vertientes se mueven, o más bien danzan, la corte real y los cortesanos, el maestro de ceremonias, damas de honor, pajes, lacayos, el resto de hadas, los cuatro príncipes pretendientes, el príncipe Desiré (Marian Walter), la princesa Aurora (Ksenia Ovsyanick) y sus padres, los reyes. Para la boda, Vsevolozhsky introdujo en el libreto a otros personajes de cuentos de hadas que acuden a la celebración como Capericita Roja y el lobo, el gato con botas, Cenicienta o la bella y la bestia. Todos contribuyen en la consistencia de una narrativa neta, casi más asimilable que la proporcionada por las palabras, solo impulsada por la magia de la danza clásica.

La bella durmiente: obra clave en la historia del ballet

Durante el prólogo, el rey Florestán XXIV y su esposa presentan a su recién nacida Aurora en sociedad a través de una gran ceremonia de bautizo. Seis hadas la agasajan con sus virtudes; el hada de las lilas goza de especial poder y relevancia. La malvada bruja Carabosse, interpretada por un bailarín masculino, irrumpe con sus secuaces-ratas, furiosa por no haber sido invitada. Lanza la maldición: en su decimosexto cumpleaños, la princesa Aurora se pinchará el dedo con un huso de una rueca y morirá. El hada de las lilas solo consigue modificar el embrujo sin neutralizarlo: cambia la muerte por un sueño de cien años del cual despertará al ser besada por un príncipe.

La fiesta en palacio para celebrar el decimosexto cumpleaños de la princesa abre el primer acto. La princesa es cortejada por cuatro príncipes. Una vieja, que resulta ser Carabosse, aparece y ofrece a Aurora el huso con el que finalmente se pinchará. Para remediar el dolor colectivo, el hada de las lilas hechiza a todo el pueblo a sumirse en un sueño que finalizará solo cuando Aurora despierte. Cien años han transcurrido entre el primer y el segundo acto. El príncipe Desiré caza en el bosque con sus lacayos. En cierto momento, se queda triste y solo, aparece el hada de las lilas que lo elige para despertar a Aurora. Le muestra una visión de la princesa que aparece en realidad en escena. Desiré sigue al hada al castillo, la besa y la despierta, proponiéndole matrimonio. El acto III se resuelve con la celebración de una boda memorable en el salón del palacio.

Coreografía y producción de Nacho Duato

El director artístico del Staatsballett Berlin, Nacho Duato, ha dado vida a este querido clásico, para el que Chaikovski compuso una partitura irrepetible. Esta producción demuestra que Duato, quien hasta ahora ha sido conocido por el público de Berlín principalmente por sus coreografías modernas, también ha demostrado que puede abordar los ballets clásicos con gran éxito. Nada en esta producción es viejo y polvoriento; la coreografía al completo es fresca, está repleta de vitalidad y colma al escenario de júbilo primaveral.

La frescura suprema de la producción radica además en que, para su «Bella durmiente», Nacho Duato omitió cierto lastre innecesario y suprimió escenas que no anticipaban la trama. Su enfoque se centra principalmente en los personajes. La intención de Duato con estas destrezas no es otra que la de atraer a un público no iniciado en el ballet.

Duato aceptó el encargo del Teatro Mikhailovsky de San Petersburgo de dirigir la coreografía de La bella durmiente, y aunque al principio tenía la intención de no perder de vista la coreografía de Petipa, pronto tuvo claro que quería desarrollar una nueva versión. Para el Staatsballett Berlin solo hizo ciertos cambios, prácticamente «pequeños detalles». Los gestos marcados están muy presentes en el ballet clásico, de los que Duato quería desprenderse; huir de esa pantomima para potenciar la expresión únicamente a través de medios asequibles a la danza.

Adagio de la Rosa, la pieza de baile más complicada del ballet

Angelina Atlagic, responsable del vestuario

La galardonada diseñadora eslovena Angelina Atlagic, quien ya había colaborado en dos ocasiones con Nacho Duato, es la responsable del vestuario de esta obra para el que tuvo en consideración sobre todo el movimiento. Una profunda documentación que inició estudiando las artes plásticas del siglo XVII y XVIII, la pintura, la arquitectura, la escultura y la indumentaria del Barroco y del Rococó.

No le bastaba con diseñar una silueta, así que intentó que el vestuario fuera también parte de la coreografía y que la ropa bailara junto a los bailarines. En ningún momento quiso crear una versión contemporánea del vestuario, ya que esto podría desconcertar a la hora de entender el argumento. El estilo ruso de la música combina completamente con el vestuario y el carácter de la pieza, de matiz afrancesado, pero con sabor inequívoco a Rusia.

TOP ÓPERA/BALLET EN DEUTSCHE OPERA BERLIN, TEMPORADA 2017-2018

La bella durmiente (Chaikovski, con coreografía de Nacho Duato): 15 y 21 de septiembre; 3, 9, 10 y 15 de octubre

La Traviata (Giuseppe Verdi): 30 de agosto; 2, 6 y 9 de septiembre

La flauta mágica (Wolfgang Amadeus Mozart): 8 de julio; 31 de agosto; 30 de septiembre; 13 de octubre; 28 de noviembre; 27 de diciembre

Paco Arteaga para BA © julio 2017
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